viernes, 27 de febrero de 2015

¿Siglo XXI?

Últimamente me siento absolutamente indignada e incómoda por ver como se adapta y se desenvuelve la sociedad respecto a diferencias individuales.
Hay momentos casuales en los que se me pone delante cualquier objeto de ser leído o visto tal una foto o una frase donde se infravalora al género femenino. No es porque yo defienda a las mujeres o sea feminista, porque por otro lado soy muy objetiva y se valorizar al hombre por sus inquietudes y a la mujer por lo mismo, eso es igualdad, eso es lo que representa la red feminista y no se confundan. Promoviendo el feminismo personalmente no incentivas al machismo, de hecho, el machismo ha estado presente mucho antes de existir el movimiento feminista, si éste movimiento ha tomado las riendas de la sociedad es porque el machismo en el pasado se encargó de machacarnos libremente.
Está claro, que no somos iguales, que nos diferenciamos en muchas cosas. Biológicamente un hombre piensa y siente de manera diferente a una mujer, y no por ello debemos ni aceptarlo en su totalidad ni tampoco cambiarlo. Pero estaría mucho más agradecida si tampoco se nos intenta cambiar por nuestra forma de pensar, que seguro, es mejor que la de ellos.

Me siento vulnerable e impotente al escuchar que una mujer es puta porque se acuesta con varios hombres, sabiendo que ellos con su simplicidad lo hacen peor y no se les juzga, me indigna el hecho de que en la sociedad se defienda que una mujer es puta porque es infiel,  me entristece que a una mujer no se la valore porque haga lo que el hombre no quiere que haga.
Si una mujer se acuesta con un hombre, está en su pleno derecho de disfrutar del sexo igual que un hombre o más porque no olvidemos que la mujer selecciona y el hombre busca. Me dan ganas a llorar cuando en la televisión se sienta un hombre a contar sus infidelidades o con cuantas mujeres se ha acostado y nos tengamos que reír, pero cuando una mujer lo hace tenemos que matarla a piedras como en la edad de Cristo.
Si una mujer que vale la pena tomó la decisión de ser infiel, estoy muy segura que la razón es porque su pareja no le proporciona atención, afecto y cariño. Pero claro, nosotras tenemos que aceptar que aun así dándole todas las necesidades afectivas que podemos a nuestra pareja ellos nos sean infieles a nosotras porque tienen necesidades sexuales primitivas.

No defiendo a la mujer por encima de todo, ni subestimo al hombre por debajo de ello. Soy consciente de que hay mujeres que no se merecen el mínimo respeto y que al contrario hay hombres muy honestos. Pero me siento muy poca identificada con las mujeres que todavía defienden la chapada a la antigua, de adaptarse al hombre como si fuera el último cobijo de la tierra, de satisfacer todas sus necesidades, ya sean desde laborales hasta personales. Me defrauda que hoy en día haya mujeres que castigan verbal y psíquicamente a otra mujer. Eso es machismo.

Elegir, esa es la palabra, hace muchos años que la mujer puede elegir libremente a quien amar, a quien dedicarle su atención, como promover su tiempo y distribuir su trabajo, como mirar por su futuro con sus propias metas, hay gente a la que se le olvida que el tiempo ha evolucionado...
Hay veces, en que por momentos y también me incluyo, baches tontos o transiciones difíciles para nosotras hagan cambiar nuestro comportamiento, y esos momentos hacen que seamos pues posiblemente mucho más débiles, haciendo que nuestro estado de ánimo dependa del estado de ánimo del hombre, aún sabiendo y siendo consientes de que el hombre no nos seca las lágrimas, aunque digamos que es intolerable que una lágrima sea llorada, pero desgraciadamente nos pasa a la mayoría. Y seamos realistas, no lo vamos a negar.

En definitiva, Las mujeres que odian a otra mujer por no ser la mujer que ellas quieren que sea ¿No se dan cuenta de que la mujer es libre de elección al igual que el hombre?

domingo, 22 de febrero de 2015

50 sombras y una realidad....

Hace muy poco se estrena la película mundial mayormente más esperada, y como no como algo expuesto a la sociedad requiere de su crítica, cualquier crítica, ya sea constructiva o destructiva. La verdad que me sorprende ver más críticas destructivas que constructivas en un siglo como el de hoy.

Tras su estreno, no ha parado las lluvias de opiniones, blogs, foros, incluso cartas, si cartas hacia personas, o incluso cartas a  hijos, con lo cual me indigna saberlo. No por el hecho de que estés en tu total derecho de expresar tu opinión en una carta como consejo, sino por el hecho de ofender a el resto de espectadoras sumamente inteligentes que si saben separar la realidad de la ficción.

Lo que si está sumamente claro, es que es una película que bajo mi punto de vista se separa en dos partes.
Primeramente es una película erótica, no vas a ver sexo excesivo para eso ya están las páginas porno que abundan Internet, lo digo para el que vaya con otra perspectiva a ver escenas inolvidables, y posteriormente la critique por no esperarse que se vean en 3D corridas y penetración, si, así hablando en bruto.
Segundo, personalmente me repatea el hecho de que haya personas que tengan que enseñarnos como ver una película y a sus actores.
Grey, es solo un personaje de ciencia ficción, que con su ficción se gana el pan de cada semana y Anastasia poco más de lo mismo, en su vida real tendrán una vida tan común como muchos de nosotros que ni os podéis imaginar. El es un hombre más en esta sociedad que cuando su orgullo le gana lo último que haría es llamar a su chica cuando más le hace falta, cosa que en la película se resalta como el llama a Anastasia luego de haberse cabreado, y ella en su vida real, es otra mujer más como muchas de nosotras en nuestra vida cotidiana, esperando a que ese chico orgulloso nos llame y no lo hace.  Dicho esto, creo que ya está bien de criticar su puesta en escena como poco hombre por tener sus propias costumbres y como poca mujer por dejarse maltratar, dentro de la ficción.
Creo que hay que poner un punto y final a las restricciones sociales y abrir un poco más la mente...
Las mujeres que se han leído la trilogía, saben perfectamente como es un hombre, y no es como Grey.
Eso sí, en cierta medida se parecen un poco a Grey, ya que hoy en día ellos dan más por culo que amor...
No me tengo que considerar poca mujer como se debiera considerar Anastasia por el hecho de leer el libro o verme la película, no gracias, además dudo mucho que ella en su vida real se dejara patear de tal manera como se deja hacer en la película.
Las personas que escriben una carta criticando ésta película,  no tienen ni el más mínimo derecho de decirnos al resto de espectadoras que el sexo con dolor y sufrimiento no forma parte del amor, perdona, eso ya lo sabíamos.
Si las mujeres vemos ésta película es porque estamos completamente abiertas a todo tipo de escenas cinematográficas y somos lo suficientemente inteligentes para entender que el sufrimiento físico o psíquico NO forma parte del amor; aunque también respeto las costumbres de aquellos que se dañan por placer y sin amor porque también existe, pero también sabemos que solo en los libros ocurre una magia explosiva de amor, el amor no convierte a una persona promiscua en tradicional...  una vez acabada la película volveremos a seguir leyendo más libros y películas de este tipo, porque como a mí y lo reconozco muchas somos curiosas, pero curiosas no significa ingenuas.